Share This Article
[ACTUALIZADO NOVIEMBRE 2022]
Todos perseguimos un mismo objetivo cuando invertimos en criptomonedas: obtener un beneficio económico. De eso van las inversiones. Sin embargo, existen métodos diferentes para conseguir un balance positivo.
Mientras hay quienes prefieren obtener un beneficio a largo plazo, optando por el apalancamiento y la retención de activos a la espera de que se revaloricen con el tiempo, otros prefieren invertir en criptomonedas buscando un beneficio prácticamente inmediato.
Según el perfil del inversor, será más conveniente optar por invertir en unos activos u otros y llevar a cabo estrategias distintas para sacar el máximo rendimiento a la inversión.
Si estás decidido a invertir en criptomonedas y no sabes por dónde empezar, sigue leyendo porque hemos hecho una pequeña recopilación con las mejores criptomonedas para invertir a corto plazo.
Ten en cuenta que estos activos pueden ser una opción para obtener un buen rendimiento en poco tiempo, pero no olvides que las enormes fluctuaciones a las que se exponen estos activos pueden hacer que esta situación cambie.
Bitcoin

Aunque en algunos aspectos necesita renovarse, sigue siendo la referencia si hablamos de inversiones recomendables a corto plazo.
Simplemente por ser la criptomoneda más consolidada ya es la opción número uno.
Urge una renovación de varios conceptos del Bitcoin que requerirán de soluciones complejas en el futuro, pero aun así es casi un suicidio no considerarla una buena opción.
El BTC es una buena opción para invertir, a pesar de las tremendas oscilaciones que sufre su capitalización bursátil.
Es una criptomoneda sin la que el criptomercado no se entiende, y por eso muchos inversores continúan apostando por ella.
Ahora que el panorama financiero mundial parece tomarse más en serio la presencia de las criptomonedas, el Bitcoin es el incuestionable protagonista del panorama global de criptos, a pesar de las tendencias bajistas experimentadas, inherentes a cualquier activo.
La última tendencia bajista ha hecho disminuir la capitalización bursátil del BTC en más de un 50%. Sin embargo, sigue siendo la opción número 1 a la hora de invertir.
Pero no olvides que el BTC, por muy consolidado que esté, no deja de estar considerado como un activo financiero de riesgo, por lo que es aconsejable que busques asesoramiento profesional en caso de querer invertir en Bitcoins y no tengas experiencia en operaciones del criptomercado.
Polkadot y DOT

De media, ha crecido un 200% y ha permitido colarse en las listas mundiales de los criptoactivos que más han crecido en todo 2021.
Su token, el DOT, está considerada como una de las criptomonedas más innovadoras por soportar múltiples cadenas de bloques de forma simultánea.
El proyecto goza de una salud extraordinaria: muchos afirman que será un jugador clave en el panorama cripto del futuro.
La red Polkadot permite hacer transferencias de activos entre diferentes blockchains en red, una funcionalidad demandada durante años por buena parte de los usuarios con dinero invertido en criptoactivos.
Un aspecto clave de la red Polkadot es la interoperabilidad, un aspecto que garantiza la compatibilidad de la cadena y facilita el intercambio de información entre aplicaciones.
Reúne varias características importantes de las nuevas redes y no fue hasta finales de 2020 cuando los inversores la consideraron como una opción muy a tener en cuenta para invertir.
Todos estos rasgos serán fundamentales para asentar y consolidar el nuevo panorama cripto que se ha abierto con la llegada de las criptomonedas de última generación.
XRP

Ripple, el nombre que se esconde detrás del acrónimo de tres letras designado al token, es uno de los sistemas de pago más eficientes y seguros.
La inmediatez es una de sus bazas, ya que todas sus transacciones se llevan a cabo de una manera mucho más rápida y económica en comparación con activos más tradicionales, como el propio Bitcoin.
Todas las operaciones realizadas con XRP pueden ser procesadas y validades en apenas 4 segundos, nada que ver con los tiempos que manejan las redes de otros activos.
Lo mejor de Ripple es que es un activo pensado para ser utilizado en múltiples ámbitos, ofreciendo un buen rendimiento tanto en usos institucionales como domésticos y empresariales.
Dicho en otras palabras: el XRP es un token apto para inversiones por parte de particulares, instituciones gubernamentales o empresas privadas.
Ofrece una escalabilidad extraordinaria: es capaz de procesar alrededor de 1500 transacciones por segundo, una cifra mucho mayor que la de muchos otros activos.
Otro aspecto que ha gustado mucho a los inversores de Ripple es que el XRP permite ser intercambiada por cualquier otra criptomoneda, una moneda fiduciaria o por un valor (oro, por ejemplo, aunque mediante el pago de una comisión simbólica).
Eso quiere decir que el XRP puede ser considerado como un mecanismo que sirva para unificar las distintas criptomonedas a nivel global, algo que casi ningún otro activo ofrece y que abre todo un mundo de posibilidades de cara al futuro.
Dados los problemas que plantea la minería y que Ripple no la admite por haber creado todas las unidades de XRPs desde el principio, es una opción muy atractiva para quienes contemplan un futuro cripto sin acciones de minado.
Y un último aspecto que conviene tener en cuenta sobre Ripple: su valor aumenta conforme mayor cantidad de bancos utilicen el protocolo Ripple, asociando su valor de mercado a la relevancia de su papel en el panorama cripto mundial.
Algorand

Bajo el escueto y hasta cómico nombre de “Algo” se esconde una de las criptomonedas que más ha crecido en los últimos tiempos.
Más de un 330% ha sido el incremento que ha experimentado, por lo que será una de las protagonistas del panorama cripto del futuro.
Algo es una criptomoneda concebida para fomentar una economía más abierta, y apuesta por la digitalización y la democratización de las ventajas de un sector financiero único y universal.
La baza con la que juega Algorand es que su token mantiene todas las características del dinero fiat, pero las traslada a un plano enteramente digital.
Eso quiere decir que Algo renuncia al concepto especulativo de los criptoactivos, puesto que lo que pretende es actuar como moneda legítima del panorama cripto.
Algo puede utilizarse para la compra de bienes y servicios, ya sea mediante comercio electrónico o como una venta minorista.
En las transacciones habituales, la cantidad de Algo se descuenta de la billetera del comprador y se suma a la del vendedor de manera prácticamente inmediata y sin coste.
Se estima que el ahorro de estas comisiones supone importantes cantidades anuales, ya que algunas tasas incluyen recargos de hasta el 7%.
Cardano

Si hablamos de criptomonedas recomendadas para invertir a corto plazo, no podemos olvidarnos de Cardano, uno de los mejores activos en los que depositar nuestro dinero y obtener jugosos beneficios en poco tiempo.
La revalorización de Cardano la ha hecho despegar hasta unos niveles que muy pocos habían previsto.
Con un crecimiento de más del 670%, es uno de los activos emergentes que más se han reforzado en el panorama cripto mundial.
Una de las características que la diferencia del resto de criptomonedas es que su red utiliza un lenguaje funcional en su plataforma de contratos inteligentes, Plutus. Al estar basada en Haskell, permite desplegar contratos inteligentes de una manera muy segura.
Es todo lo contrario a lenguajes como Solidity, que se han visto comprometidos más de una vez por culpa de numerosas deficiencias en la auditoría de los códigos, o simplemente por un análisis mal hecho. Eso queda solventado con Plutus.
Ouroboros, su protocolo de participación, es el más sostenible a día de hoy. Es el primero revisado por pares, lo que da buena cuenta de su verificación y del nivel de seguridad que ofrece.
Y, cómo no, en Cardano destaca lo que se conoce como “gobernanza”, un concepto que apuesta por la democratización. Y es que en Cardano todos los poseedores de un activo tienen voz y voto en la toma de decisiones que definirán el devenir de la red.